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- ¿Por qué cree tan extendida la imagen del propietario como un ser maligno que derriba su casa para especular sobre ella con la complicidad de los políticos?
- Un edificio, o se usa y se mantiene o termina arruinándose. Cuando pasa la inspección para la ITE, si el coste de rehabilitación es superior en un 50 por ciento al valor de reposición de la vivienda, el Ayuntamiento permite la demolición porque lo permite la ley. Habría que intentar no llegar a ese punto, que el Ayuntamiento facilitara no tener que llegar a eso. Los solares que nos estamos encontrando no son una sorpresa, se preveía con la aplicación de las ITE.
- ¿Los arquitectos son alérgicos a la rehabilitación?
- Rotundamente, no. Yo misma he hecho más rehabilitación que obra nueva. Es más fácil ponerte a trabajar sobre un solar llanito, donde lo controlas todo desde los cimientos a tener que hacer catas en un edificio en el que no sabes por dónde vas a terminar saliendo... arriesgas más, pero profesionalmente es muy atractivo también. En eso coincidimos con el VI Plan Regional de Vivienda, que es el de las tres "r": regeneración, rehabilitación y renovación urbana. Tenemos que apostar por la rehabilitación, claramente. Pero es que estamos en 2015 y el Plan acaba en 2016... Cuando queramos aprendernos la gestión, se nos van a haber pasado los plazos.
- ¿Es de las que cree que el casco antiguo de Guadalajara tiene remedio?
- Es un casco que tiene sus problemas, pero no se ha abandonado nunca, como sí ha ocurrido en otras ciudades, lleno de "okupas" y que ha costado muchísimo volverlos a regenerar. Yo soy residente del centro de la ciudad y no he visto esa degradación. Es cierto que antes había más gente los sábados y los domingos paseando por la Calle Mayor... que son los que ahora se van al centro comercial, pero también a Aguas Vivas, a los bulevares donde se han abierto los nuevos bares, cuando lo normal sería que estuvieran en el centro y no en la periferia. Los bares son los que dan vida a los cascos históricos.
- ¿En qué medida han sido los arquitectos, los de los ayuntamientos y los particulares, responsables de todo este desaguisado?
- Hemos sido víctimas, más bien. Insisto en que, para mí, los mayores responsables son las instituciones financieras, que sobrecalentaron con créditos baratos en un primer momento y luego han vuelto a hundir el mercado al quedarse con todo el parque de viviendas sin vender y poniéndolas en circulación a un precio con el que han bloqueado al resto. Ellos son los que tienen todo el control inmobiliario, no nos engañemos. En la fase de más desarrollo antes del estallido de la burbuja, ningún arquitecto tenía a su alcance prever si iba a seguir creciendo o no una ciudad, parecía que íbamos a construirlo todo.
- De acuerdo… pero los dislates no dejan de producirse, me temo, incluso ahora. ¿Qué sentido tiene empezar a levantar semanas atrás un nuevo edificio de los Juzgados junto al cuartel de los GEO, en una calle que es un fondo de saco al otro lado de la autovía? ¿Cómo casa eso con todo lo que hablamos de intentar mantener con vida el casco de Guadalajara?
- … y la Torre Caja Guadalajara desocupada, sí… Cuando hay edificios que se pueden recuperar, no es tan difícil adaptarlos. No construyas nuevo cuando te sobra con lo ya edificado. ¡Claro que deberíamos adaptar y utilizar lo que tenemos! La actividad no vamos a recuperarla con obra nueva de aquí a muchos años, ya estamos tardando en asumir que debemos rehabilitar lo que tenemos. Los arquitectos tenemos que ser los primeros en convencernos de eso y explicar a nuestros clientes que si tiene un edificio del que puede mantener la estructura, a lo mejor lo que tiene que hace es poner un aislamiento en la fachada, instalar un ascensor, darle accesibilidad y conseguir un edificio con buenas condiciones de uso. Le va a salir mucho más barato que tirarlo y hacer uno nuevo.
- Hay colegas suyos que sostienen que la única demanda potencial sin atender en Guadalajara es la de vivienda amplia y de lujo situada en el centro de la ciudad.
- La vivienda cara tiene un mercado muy limitado. El que puede pagarlo, lo normal es que quiera diseñárselo a su gusto. Me parece a mí que la demanda más relevante es la de parejas jóvenes que quieren una primera vivienda o mejorar la que tienen, en calidad o en superficie. Eso es lo que veo desde mi experiencia.
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