El pasado miércoles, 15 de agosto, fue la fiesta patronal de la diócesis: el misterio de la Asunción de la Virgen María en cuerpo y alma a los cielos. La celebración diocesana principal de esta fiesta patronal tuvo lugar en la Catedral seguntina, también dedicada a esta advocación, a las 12 horas.
Desde 1961 la diócesis de Sigüenza-Guadalajara tiene como patrona a la Virgen María en el misterio de su Asunción. Hasta entonces, Santa Librada, Virgen y Mártir, era la patrona del histórico Obispado de Sigüenza.
Sucedió que en 1955 -hace, pues, 52 años- la Santa Sede hizo coincidir los límites de la provincia de Guadalajara con los de la diócesis y cuatro años después el Papa Juan XXIII a esta vieja-nueva diócesis le imponía el nombre de "Sigüenza-Guadalajara". El Obispo Lorenzo Bereciartúa Balerdi decretaba después que la Asunción de María fuera la fiesta patronal de la diócesis, al igual que, desde su construcción, lo era de la Catedral.
De las más de cuatrocientas parroquias que hay en la diócesis, algo más de un centenar están puestas igualmente bajo el título y el patrocinio de la Asunción. Asimismo, el miércoles, día 15 de agosto, es fiesta en honor de María asunta a los cielos en Brihuega, bajo el título de la Peña, en Cogolludo o Poveda de la Sierra, con la advocación de la Virgen de los Remedios, en Durón, con su Virgen de la Esperanza, en Uceda con la Virgen de la Varga, en Pastrana y Congostrina con la Virgen de la Asunción.
En torno también al 15 de agosto se celebran fiestas en honor a María, trasladadas -como queda dicho- de su emplazamiento primitivo: la Virgen del Rosario de Ocentejo, la Virgen del Pinar de Galve de Sorbe, la Virgen del Lluvio de Clares, la Virgen del Buen Suceso de Codes, la Virgen del Buen Amor de Terzaga, la Virgen de las Cuevas de Torrecuadrada de los Valles, la Virgen de la Torre de Peñalén, la Virgen del Pulgar de La Cabrera o la Virgen de Nazaret en Viana