El Ayuntamiento de Marchamalo incluirá en su Ordenanza Reguladora de Medio Ambiente los vertidos de azufre u otras sustancias tóxicas en la vía pública entre las prohibiciones específicas del texto, cuyo incumplimiento será considerado como una infracción de carácter leve que puede conllevar sanciones de hasta 750 euros. La propuesta será elevada al pleno el próximo jueves por parte del Concejal de Medio Ambiente, Manuel Recio, dadas las repetidas situaciones de vertidos de este tipo sobre la vía pública que se vienen dando en Marchamalo.
“El azufre que se coloca con la intención de evitar que los perros orinen, en especial en edificios de viviendas y locales comerciales es una medida que, aparte de no ser efectiva, solo sirve para lanzar una sustancia tóxica a la calle, por eso debemos regularlo y concienciar a la población de los graves perjuicios que genera”, ha señalado el concejal para explicar esta medida, que viene a regular a nivel municipal una prohibición que ya viene reflejada en normas de índole nacional y regional y que ahora se incluye en esta ordenanza con la finalidad de que pueda ser el propio consistorio el que tramite de forma directa las correspondientes sanciones por su incumplimiento.
Tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil suelen informar con asiduidad de que estas prácticas no solo están prohibidas, sino que está constatado que son inefectivas a pesar de que suponen un grave riesgo para la salud tanto de animales como de personas, “el azufre es una sustancia peligrosa que puede afectar a la salud cuando es inhalado, ingerido o por contacto con la piel".