Gritos, bufandas, camisetas y mucha alegría es lo que se ha respirado en la tarde de este lunes a lo largo del paseo triunfal de los jugadores del Deportivo Guadalajara. Todo un arsenal de vítores que ha regalado la afición a sus jugadores ante su entrada triunfal en la Segunda División tras un último partido vibrante y sin duda histórico.
Los jugadores del Deportivo Guadalajara han sido recibidos por su afición como se merecen, como auténticos campeones tras conseguir ascender a Segunda División. Un esfuerzo que los seguidores han sabido agradecer a lo largo de toda la jornada del lunes con un recibimiento caluroso y no menos ruidoso que ha querido homenajear el trabajo duro de este combinado que pasó página en el campo del Mirandés.
El recorrido de estos campeones se ha iniciado en el que ya es todo un estandarte del buen juego, el ”Pedro Escartín”, desde donde han recorrido parte de la ciudad en su autobús. Los colores morados inundaban buena parte de la celebración que ha continuado bajo el manto de la Virgen de la Antigua. A su patrona han ofrecido el ascenso y le han agradecido la fuerza y el empuje que los jugadores alcarreños demostraron en su último partido.
Los guadalajareños saben ser agradecidos y así lo han demostrado a su entrada a la Plaza Mayor donde los jugadores han compartido su ascenso con sus seguidores. También lo han hecho con el propio alcalde, Antonio Román, y toda la corporación municipal que los han recibido a su llegada a la Casa Consistorial. Además de felicitaciones, los jugadores han recibido de la mano del primer edil una reproducción del Palacio del Infantado, como recuerdo de la gesta conseguida.
La afición fue cantando todos y cada una de las letras que ya se han convertido en habituales en el “Pedro Escartín” cada domingo. Pero el éxtasis fue total justo en el momento en el que aparecieron los futbolistas, entonces, la locura invadió a cada aficionado congregado en la plaza. . Quizás, los discursos más emotivos y representativos se produjeron ya en el Salón de Plenos del Ayuntamiento por parte de dos personas muy queridas por la afición: el capitán Jorge y el entrenador; Carlos Terrazas. A este último la gente congregada le gritó “Terrazas quédate, Terrazas, quédate”.
Simbiosis entre equipo y afición
Mucho se ha hablado y escrito ya de las claves que han hecho posible el histórico ascenso del Deportivo Guadalajara. Y en cualquier análisis es imposible no mencionar la perfecta simbiosis entre equipo y afición, o afición y equipo, porque no se entendería el uno sin el otro.
La noche del lunes fue la elegida para que los dos elementos se agradeciesen mutuamente el esfuerzo realizado durante un curso que ha sido largo y difícil. Porque ambos, equipo y afición, saben que esa unión será fundamental para consolidar un proyecto que ya solo piensa en Segunda División. A partir de las diez de la noche la celebración se trasladó a la Plaza Mayor y a la Concordia.