Miércoles, 4 de agosto de 2021    
Bisbal y Chenoa llenaron el "Pedro Escartín"
Actualizado 17 septiembre 2002
  • Con todo el papel vendido, David Bisbal y Chenoa ejercieron de estrellas en el concierto más esperado de las Ferias de Guadalajara. Los miles de niños que acudieron y buena parte de sus acompañantes disfrutaron del espectáculo; los más críticos también tuvieron satisfacción, al comprobar en vivo las limitaciones canoras de Bisbal 

La organización fue tan perfecta que no parecía un concierto de masas, a pesar de haberse concentrado en el "Pedro Escartín" casi 20.000 personas. Quien quiso ocupar las primeras filas y dar rienda al espíritu devoto de los "fans" pudo hacerlo, tras montar guardia durante horas o días. Los que suspiraban por poder acostar pronto a sus retoños tampoco salieron mal librados, pues los primeros acordes sonaron a las diez y media de la noche, con una puntualidad insólita en este tipo de citas.  

La primera mitad del espectáculo estuvo reservada para Chenoa, que acreditó chorro de voz y un loable afán para animar a los ya de por sí animosos espectadores. Tras 55 minutos de sucesivas canciones y una aparición espectral (en video grabado) del deseado David Bisbal, el cantante se hizo carne y mostró sus pectorales, ejerció de peonza humana y demostró que para hablar no es preciso disponer de un amplio vocabulario, sobre todo si se sabe gritar Gualajara y sonreir al mismo tiempo. El lunes fue, sin duda, el protagonista de los comentarios en los patios de los colegios de la capital alcarreña. Misión cumplida.